La irrupción de la inteligencia artificial se ha producido de una manera inminente y ya es toda una realidad, y como suele ocurrir con todo el mundo digital, la evolución será vertiginosa.
Los principales buscadores de internet ya lo están comenzando a implementar, el primero ha sido Bing, que ya ofrece respuestas usando el motor de ChatGPT y también parece que será el turno de Google, con su propia IA, en una carrera contrareloj y con una competencia increíble.
Muchos creadores de contenido, especialmente los que tienen páginas web o blogs se sienten preocupados y se preguntan si la IA afectará al posicionamiento de su página.
Lógicamente el uso de la IA en los buscadores cambia las reglas del juego, ya que hasta ahora los buscadores arrojaban como resultado un conjunto de sitios web… ahora los buscadores lo que harán será facilitar respuestas al usuario.
El hecho de facilitar respuestas directas, significa fundamentalmente que el usuario no deberá o no tendrá la necesidad de visitar un segundo sitio a parte del buscador en cuestión para, valga la redundancia, encontrar lo que busca.
El dilema de la publicidad online
Aquí encontramos un par de aspectos que se deben tener en cuenta a nivel de publicidad online.
Por una parte el hecho que los editores de sitios web obtienen ingresos a partir de las visitas, la publicidad que ofrecen servicios como Google Adsense, basados en visitas y clics a los anuncios, si la mayoría de esas visitas se producen de una manera natural, a partir de los resultados de Google, por ejemplo, entonces las páginas recibirán menos visitas, si cambia de una manera radical el sistema.
Pero también hay que tener en cuenta que esa misma publicidad, en sitios web y en el mismo buscador supone un ingreso importante para Google.
Google Adwords sigue siendo una plataforma muy usada por parte de los negocios y emprendedores que quieren mejorar su visibilidad y generar resultados.
Por tanto, la publicidad online seguirá existiendo ya que supone una buena fuente de ingresos para los buscadores…
Me da la sensación que en el momento en el que preguntemos alguna cosa al buscador con IA la respuesta vaya a a estar condicionada por esa publicidad, o tal vez aparezca como un anuncio antes, después o durante esa respuesta ofrecida, o que incluso pueda estar, y esto sería algo un tanto peligroso y perjudicial para el usuario.
Ya veremos cual es la dirección que toma el mundo del SEO y el SEM y como se adapta a la inteligencia a todo y viceversa…